Kukulcán y el equinoccio de los Mayas


Llegó la primavera y faltaba en este blog el artículo dedicado, como es costumbre, al equinoccio. Ese momento en que un observador situado en el ecuador celeste llega a tener el Sol encima de su cabeza, en el cenit, a 90º. Se produjo el 20 de Marzo, y en este artículo venimos a rememorarlo en otro de esos monumentos astronómicos que no dejan indiferente a nadie.

Si habéis visitado la península del Yucatán, seguramente conozcáis Chichen Itzá, metrópolis del pueblo de los itzaes y actual complejo arqueológico entre Mérida y Cancún:

Chichen Itzá
Chichen Itzá

La llegada del equinoccio en este lugar es conocido y celebrado a nivel mundial, pero quizás el fenómeno que más espectadores congrega sea el descenso de Kukulcán, un efecto de luces y sombras que parece hacer descender a la deidad maya de la pirámide del mismo nombre.

El punto Aries o punto vernal es uno de esos puntos característicos astronómicos que sirve como referencia para la medida de las coordenadas ecuatoriales de las estrellas. Los mayas ya sabían que conocer este punto con exactitud era muy importante, sobra decir que la medida del tiempo y su calendario se consideran de los más precisos de los pueblos antiguos. La pirámide de Kukulcán es otro ejemplo de que conocían muy bien los equinocios de primavera y otoño. El punto Aries es el origen de la ascensión recta de una estrella, y se elige porque es un punto fijo en el espacio que no depende de la rotación o traslación de la Tierra. Bueno, en realidad cambia un poco de sitio;

http://principiatechnologica.com/wp-content/uploads/2013/07/25/en-los-dias-del-mundo-no-todo-es-rotacion/

La pirámide que nos trae hoy aquí no está orientada según los puntos cardinales, eso habría sido muy fácil, sino que su base cuadrada está girada 17 grados con respecto al norte geográfico. Esto permite que, conociendo el punto exacto por donde saldrá (Este exacto) y se meterá el sol (Oeste exacto) los días de los equinoccios, se proyecte la sombra de los escalones de la pirámide sobre la gran escalinata de la cara norte.

En realidad se forman siete triángulos de sombra proyectados por los escalones, que terminan en una gran cabeza de la serpiente emplumada, Kukulcán, produciendo un efecto óptico que parece representar a la propia serpiente descendiendo de la pirámide.

Kukulcán
Kukulcán

Hay una genial herramienta online que nos permite conocer el recorrido exacto del sol en cualquier lugar del planeta:

http://www.sunearthtools.com/

Si ajustamos al equinoccio de primavera en Chichén Itzá:

equinoccio Chichén Itzá
equinoccio Chichén Itzá

De camino al solsticio de verano, como nos encontramos en este momento, la metrópolis tendrá más horas de luz con amaneceres y ocasos más septentrionales, con mediodías más cercanos al cenit, donde los mayas tuvieron el placer de encontrar el Sol dado que la península del Yucatán está por debajo del Trópico de Cáncer.

Y hasta el próximo equinoccio.

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